La incongruencia tiene alas

«Para significar imposibilidad o incongruencia, Virgilio habló de encastar caballos con grifos. […] Con el tiempo, la locución «Cruzar grifos con caballos» llegó a ser proverbial; a principios del siglo XVI, Ludovico Ariosto la recordó e inventó al Hipogrifo.

Águila y león conviven en el grifo de los antiguos; caballo y grifo en el Hipogrifo ariotesco, que es un monstruo o una imaginación de segundo grado».

Fuente: BORGES, Jorge Luis. El libro de los seres imaginarios. Barcelona: Bruguera, 1986, p. 118.

Imagen: DERMOT POWER. «Hipogrifo volando», 2002. Diseño del hipogrifo Buckbeak, creado para la película El prisionero de Azkaban.

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Más valen ciento volando


STRAET, Jan van der. Venationes Ferarum… Bélgica: Phillippe Galle, ca. 1600. Fuente: Biblioteca Nacional de España.

Parecen muy lejanos los tiempos en que los cielos abundaban en golondrinas y vencejos, hasta el punto que los niños los atrapaban al vuelo desde los balcones de sus casas.

Ahora, que son pocas las veces que nos alegran la vista y el oído con sus acrobacias y chillidos, hemos aprendido que cuando tienes un pájaro en la mano, lo que más vale es dejar que vuelva a volar.

El origen del «hielo caliente»

«—Ahí está la cosa, amiguito —dijo fatigadamente— […] helábamos aquel agua caliente tan endiabladamente aprisa que el hielo quedaba tibio todavía!»

Fuente: ASIMOV, Isaac. «Cronogato», Isaac Asimov: Selección 3. Barcelona: Bruguera, 1983, p. 16. Relato publicado originalmente en la revista Astounding, en el año 1941.
Imagen: Ilustración del paradójico «hielo caliente», uno de los productos más valiosos en el videojuego No Man’s Sky.

La cara no es el espejo del alma

LE BRUN, Charles. Láminas extraidas de su libro Liure de portraiture pour ceux qui commencent à dessiner. París, ca. 1700.

Las teorías que relacionan el aspecto de las personas con su personalidad son tan antiguas como la civilización, pero a partir de la Edad Moderna llegaron a desarrollarse como una pseudociencia, la Fisiognomía o Fisiognómica. Aunque parezca divertido comparar los rostros de personas con animales, o tratar de adivinar los pensamientos que se esconden tras los gestos, esta idea es intrínsecamente peligrosa. El análisis fisiognómico y la frenología se han utilizado como pruebas inculpatorias en juicios, y sirven de pretexto a los racismos más violentos.

Fuente: Gallica

El Universo Paralelo de Luigi Serafini

Imagina peces con largas melenas, árboles nadando en el mar o plantas que llueven sobre sí mismas. Estos seres viven en el Codex Seraphinianus —una posmoderna vuelta de tuerca al Manuscrito Voynich—, que fue dibujado y escrito en un lenguaje imaginario por Luigi Serafini. O quizá, como nos cuenta Luigi, la verdadera autora fue una gata blanca; quién sabe.

Fuente: SERAFINI, Luigi. Codex Seraphinianus. Milán: Rizzoli, 2015.

Blasones de Japón

Fotomontaje realizado con un «kamon» que representa un cangrejo. © LSM 2021

Los «kamon» son los blasones heráldicos japoneses, semejantes a los escudos nobiliarios europeos. Por su abstracta simplicidad, parecen tan modernos que podrían confundirse fácilmente con logotipos o pictogramas contemporáneos. Quizá por esto mismo resulta especialmente necesario conocerlos para los amantes del diseño, y ya que estamos, disfrutar de su intemporal belleza.

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145 megas de rinoceronte

La Biblioteca del Congreso de Estados Unidos ofrece digitalizaciones de altísima resolución de sus archivos, como los 7.575 x 6.476 píxeles de este famoso Rinoceronte de Alberto Durero. Para los amantes del arte y el diseño es todo un descubrimiento poder apreciar la técnica de los artistas con tanto detalle, además de un auténtico placer.

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Impresores a la vanguardia

FÉRAT, Jules Descartes. «Imprimerie ambulante de l’armée d’Italie». L’Illustration, 28 mai 1859, p. 360

Mover una imprenta tipográfica no debe ser tarea fácil (no hay que olvidar que los tipos son de plomo), especialmente si el transporte es una carreta. Aún así, parece claro que cuando las circunstancias lo requieren, no se duda en movilizar a los impresores y enviarlos al campo de batalla.

Fuente: Brown University Library